La mayoría de las rótulas puede llegar a aguantar una vida útil de 100,000 millas antes de comenzar a desgastarse por las constantes vueltas y conducción sobre terrenos difíciles. En muchos casos, este desgaste se multiplica por la contaminación de las mismas y la falta de lubicación en ellas.
Andar con una rótula desgastada compromete la seguridad del vehículo y debe ser reemplazada únicamente esa pieza, pues no es obligatorio cambiar su contraparte del lado opuesto. En un auto con largo kilometraje sí está recomendado reemplazar ambas rótulas pues es probable que si una falla, las demás presenten un desgaste similar.