Resulta indispensable para que tu motor funcione como toca, puesto que su presencia posibilita que el sistema de inyección reciba gasolina a partir de la succión de este líquido por parte de los rieles.
Hay una regla de tres básica en el funcionamiento de una bomba de gasolina. Cuanta más potencia requiera un motor, más caudal de gasolina y presión necesitará su funcionamiento ideal. Además, la bomba de gasolina garantiza, mediante su regulador de presión, que el circuito de alimentación del motor reciba un suministro suficiente y constante.